¡HOLA FAMILIAS!
"El miedo siempre está dispuesto a ver las cosas peor de lo que son." Tito Livio
Hoy
vamos a seguir con estas entradas especiales que estos días estamos
dedicando a los sentimientos, y queremos hablaros de otra emoción que
sin duda nosotros estamos sintiendo; y sin poder evitarlo, transmitimos a
nuestros pequeños: el MIEDO.
Como
dice la cita, el miedo, en cierto modo, nos hace ver las cosas peor de
lo que ya son. En estos momentos que estamos viviendo, seguramente TODOS estamos
invadidos por infinidad de miedos. Esto es normal, ya que la
incertidumbre y el desconocimiento a lo que va a venir nos origina esto,
miedo. Tenemos miedo por nuestra propia salud y la de los nuestros, por
nuestro trabajo, por lo que nos puede venir en un futuro próximo, por
cuánto va a durar esta tremenda situación... Como veis, si como adultos
tenemos infinidad de miedos, nuestros peques están en la misma
situación.
Podemos
pensar que los miedos que sienten los niños estos días están
infundados, pero ¿acaso pensamos que son ajenos a los miedos que en este
momento podemos tener nosotros?, ¿a los que les transmitimos y a los
que perciben? Igual es el momento de plantearnos realmente qué es el
miedo.
¿Qué entendemos por miedo?
El
miedo, también conocido como “temor” aparece cuando crees que vas a
sufrir un daño, un daño de cualquier tipo. Cuando este miedo crece
muchísimo puede convertirse e terror y aquí es cuando perdemos el
control. Como todos los sentimientos, tiene una función, y en este caso
es la supervivencia, ya que nos ayuda a estar alerta ante los peligros.
El problema se origina cuando ese miedo va a más y se convierte en
terror; ya que terror nos paraliza y no nos deja pensar de forma
coherente. La situación que
ahora estamos viviendo está llena de hechos negativos, así que el miedo y
el terror se encuentran a la vuelta de la esquina. En este sentido,
nuestro primordial objetivo es intentar gestionar el miedo para que no derive en terror.
Si nos centramos en los miedos infantiles, SON EVOLUTIVOS Y NORMALES a
cierta edad, cambiando el objeto temido a medida que el niño va
creciendo. Nuestros hijos pueden sentir miedo al separarse de nosotros, a
los monstruos, los fantasmas, las oscuridad , a los animales… Después
hay otro tipo de miedos que surgen cuando viven situaciones difíciles o
excepcionales como la que nos encontramos ahora. En estos casos los
miedos ya no son tan infundados y pueden ser más diversos: a
que algún familiar enferme, que sea él mismo el que enferme... Es decir,
esta situación no deja de ser una experiencia vital extraordinaria que
TODOS estamos viviendo de un cierto modo “traumático” y TODOS estamos
teniendo reacciones emocionales diversas.
Y ¿en qué parte de nuestro cuerpo percibimos el miedo?
Como
en el resto de emociones, es importantísimo que los peques sitúen el
miedo en su propio cuerpo. Puede ser en el pecho, en la cabeza, en el
estómago... Cuando lo tengan localizado, vamos a tratar de afrontar
este miedo e intentar superarlo para que no derive en un terror.
Sin lugar a dudas, para poder tratar el miedo en nuestros peques tenemos que tener en cuenta ciertos aspectos muy importantes:
- NUNCA RIDICULIZAR AL NIÑO, por extraño que nos parezca el miedo.
No debemos reñirles ni obligarles a cambiar la actitud...
Así
no conseguiremos lo que perseguimos, que no es otra cosa que consigan
manejar sus miedos; es decir, que sean capaces de gestionar esa emoción.
Tenemos que tratar de mostrarle TRANQUILIDAD sin que piensen que no
tenemos en cuenta lo que sienten. Si nos mostramos nosotros
excesivamente preocupados, agravamos el problema…
- AFRONTAR JUNTOS LOS MIEDOS ya que, en cierta medida la solución
al
malestar que les producen los miedos es afrontarlos, no evitarlos. Este
proceso lo tenemos que llevar a cabo poquito a poquito, celebrando
los logros y sin dar importancia a los retrocesos.
En estos momentos, los adultos tenemos que EVITAR CONVERSACIONES en
las que ponemos de manifiesto nuestros miedos (algo muy difícil porque
queremos saber datos, preguntamos por familiares enfermos…) Intentemos
evitar que nuestros peques lo escuchen, bastante tienen con lo que les
transmitimos inconscientemente, incluso de forma no verbal.
Una vez que hemos reconocido el miedo , estamos listos para afrontarlo, y para HABLAR de ello. Si hablándolos y afrontándolos vemos
que los miedos continúan, os vamos a poner dos recursos que, oye, no
sabemos muy bien porqué ni porqué no, pero en muchas ocasiones
funcionan. Vamos a verlas:
Si
sois manitas con la costura podéis crear un muñeco en una boca con
cremallera. El peque deposita ahí sus miedos (que podemos escribir en un
papelito) y ahí quedan guardados para que no salgan. Además de con
telas, se puede hacer con cartulinas o con lo que se os ocurra.
Os animamos de verdad a hablar del tema, a escuchar a nuestros peques y a pensar con ellos cómo podemos ayudarles.
Escuchemos, respetemos sus miedos y tratemos por todo los medios de no
contagiarles los terrores que esta situación nos genera a nosotros. En
definitiva, acompañémosles ayudándoles en las dificultades que se les
plantean.
Y
como siempre, no hay nada mejor que un cuento para llegar a ellos.
Sabéis que a nosotras nos encanta este recurso, y son varios los que
tratan muy bien el tema del miedo. Por eso, queremos compartir con todos vosotros uno de nuestros preferidos: YO MATARÉ MONSTRUOS POR TÍ
ÁNIMO FAMILIAS, ENTENDEMOS Y VALORAMOS VUESTRO ESFUERZO. Sabéis que contáis con nosotras siempre así que os mandamos un abrazo muy fuerte.
Gracias! Esta emoción también puede ser muy peliaguda y está muy bien hablar de ella.
ResponderEliminarUna idea para quien no cosa nada como yo jeje: un fantasma come-miedos. Aqui sale la información: https://aventuradiminuta.blogspot.com/2012/10/el-fantasma-come-miedos-actividad-para.html
El cuento de "Yo mataré monstruos por ti" lo tenemos. Además los tios de Yoel son super fans del autor y cantante de LOL :)
Un abrazo!